Todas estas son quemaduras leves, de primer grado, que afectan solamente a la capa más superficial de la piel (epidermis). Y aunque sé que es innecesario, voy a citar algunos de los signos más evidentes: piel enrojecida y seca, dolor (ardor) y una leve inflamación.
Vamos a ver en 4 sencillos pasos cómo proceder ante una quemadura leve:
- Apartar el área afectada de la fuente de calor (sinceramente, no creo a nadie capaz de saltarse este paso). Y en el caso de las quemaduras solares, le aconsejo comprar una sombrilla.
- Dejar correr agua fría (no helada) sobre la quemadura durante unos 10 minutos (o ponerla a remojo, que se gasta menos agua y te hace el apaño igualmente).
- Cubrir la zona con un vendaje seco, intentando protegerla de fricciones y presiones.
- Tomar ibuprofeno o paracetamol en caso de inflamación y dolor.
Estas quemaduras tienen una curación relativamente rápida, pero ya que hoy me siento generosa, ahí van unos remedios caseros para ayudar a la cicatrización y a disminuir el dolor:
- El aloe vera (tanto si es natural como en loción) ayuda a regenerar la piel, además de refrescarla y bajar la hinchazón,
- Mojar un paño limpio en una mezcla de vinagre y agua a partes iguales y aplicarlo sobre la quemadura ayuda a reducir la inflamación y el dolor.
- El tomate cortado en rodajas o el jugo de una cebolla (entre esto y el vinagre ya tenemos la ensalada) harán disminuir el dolor y evitar la aparición de ampollas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario